Nuestro cinquillo

Nuestro cinquillo

viernes, 7 de mayo de 2010

Una buena despedida.........sin saber que era un adiós

El mismo fin de semana que estuvimos en Granollers, nosotros (niña incluida, como no) y una pareja muy maja, también miembros del club, decidimos pasar la noche cerca de Anglés para participar en la concentración del domingo. El hostal donde nos hospedamos era de estilo rural, acogedor, familiar (volvería con los ojos cerrados).

 
Frio, lluvia intermitente, esperemos que mañana se arregle el dia y podamos lucir los cochecillos. Y sí, aguantó, el dia nos dejó disfrutar de todas las maravillas expuestas. Había muchos cinquillos, pero la verdad es que la variedad marcó la exposición. Además había un mercadillo de cosas antiguas esperando que algún coleccionista las comprara (relojes, periodicos, libros, futbolines, baules, juguetes, etc.).



¿Por qué su última salida? Pues vereis... dias después, en una salida para lavarlo, cargarle las pilas, y por una salida de rutina, mi marido pilló una placa de hielo y volcó a pocos metros de casa. Durante unas cuantas semanas lo pasamos bastante mal moralmente (por suerte no hay que lamentar nada personal). Teníamos que decir adios a una ilusión, un entretenimiento familiar, un esfuerzo personal,.......un amigo........ el blauet que nos hizo pasar ratos muy agradables en familia y entre amigos. Eso, por el momento, se esfumó............



Pero yo, que no podía ver sufrir de esa manera a mi marido le conseguí otro. En breve os lo presentaré. Hasta pronto!!!!








sábado, 20 de marzo de 2010

Exposición en Granollers

En enero nos vimos en Granollers donde nos juntamos mucha gente y muchos coches. Hubo comida, exhibiciones, sorteo, música, merendola y muuuuchos coches. Una cosa que destacaría fue la exhibición de un niño de cinco años con su kar, una pasada de niño!!! Conducía casi mejor que caminaba, uf. También hubo una exhibición de motos, dos chavales que hacían lo que querían con sus motos.
 

Fue un día ameno, familiar y entretenido.

miércoles, 27 de enero de 2010

A Papá Noel le gustan los "turbitos"

Diciembre, día 19, Papá Noel invita al Club de Catalunya del Renault 5 GT Turbo a presenciar su llegada al Parque de Bomberos de Cerdanyola.
Como siempre, nos juntamos en Terrassa, damos la bienvenida a los nuevos socios, charlamos un ratillo con los que nos vamos conociendo, los niños descargan los nervios en el parque y los presidentes nos dan las últimas indicaciones e informaciones de lo que va a ser el evento. Nos ponemos en marcha, y como siempre, ¡que bonito es ver circular a todos los cinquillos juntos! y que gracia hace ver como te miran y saludan al pasar por las calles.
Al llegar al Parque de Bomberos nos alineamos bien y vamos pidiendo paciencia los que
llevamos niños detras, porque ya han visto el castillo hinchable de la entrada y están locos por salir del coche. Una vez se han cansado de saltar es el momento de hacerles ver que dentro hay un mundo de actividades por descubrir: maquillaje para ir bien guapos a ver a Papá Noel, talleres de dibujo para pintar a los bomberos apagando fuegos y rescatando personas, confección de coronas. Las coronas tuvieron muuucho éxito, allá donde miraras veías un niño con corona listo para recivir a Papá Noel.









Un ruido....¡¡¡Un helicóptero!!! ¿Será él?..... Pues no, pero no hay que desesperar. Juguemos otro rato. ¡¡¡Otro helicóptero!!! ¡¡¡Sí, sí, sí!!! ¡Es él, ya ha llegado! ¡Mamá mi carta! ¡Papá, corre que no llegamos! Ahora toca hacer cola y esperar a que diga nuestro nombre para darle la carta y recivir ese presente tan esperado (porque nos hemos portado taaaan bien .........). Pero la lista es larga, y hay que decir que es admirable la paciencia de los niños y la inagotable ilusión que demostraron durante todo el día a pesar del frío que hacía. ¡¡Me toca!! ¡Voy! ¡Cuantas cosas nos ha dado! El zumo de mamá no me lo bebo nunca, pero este me lo ha dado Papá Noel y me tomo hasta la última gota, jeje, y las galletas,... hasta la última miguita, menuda merendola. Y los colores, los mejores, los juguetes, uf!, cuantas cosas chulas...

Solo me queda dar las gracias al Parque de Bomberos de Cerdanyola por llevar ilusión a un montón de peques (y no tan peques). Por cierto, por la noche nos cenamos una fondue de queso para chuparse los dedos. GRACIAS por todo.
Nos vemos en Enero.......